Uno de los imputados por la causa de planes sociales, entregó cheques al club Pacífico para pagar el piso flotante de una cancha de básquet. Los fondos provenían de una «caja azul» asociada a programas de ayuda social.
El gobierno de Rolo Figueroa sigue investigando a los imputados relacionados a la estafa de planes sociales. En el último tiempo se descubrió que uno de los imputados, Julio Arteaga, entregaba cheques destinados a personas del club Pacífico de Neuquén. Con estos fondos desviados, se cubrieron gastos como la cuenta de gas y luz del club, además de solventar el costo del piso de parqué flotante de la cancha de básquet. Los cheques fueron entregados sin que en el club se cuestionara su origen, ya que venían a nombre de otras personas.
Arteaga, quien se desempeñaba como contador y tuvo a su cargo auditorías internas en la Contaduría General de la Provincia, es considerado uno de los principales imputados en este caso. La fiscalía lo ubica en el segundo nivel de importancia dentro de la organización criminal que gestionaba los fondos de los planes sociales. Según los informes, Arteaga recibía cheques de la «caja azul», un fondo irregular manejado en la Dirección de Planes Sociales, que incluía pagos provenientes de cajeros automáticos y fondos destinados a beneficiarios de planes sociales.
A pesar de que inicialmente se barajó un acuerdo con la fiscalía, en el que Arteaga podría haber aceptado una pena reducida, el imputado decidió finalmente ir a juicio. Aunque su defensa solicita la revisión del embargo de un automóvil propiedad de Arteaga, argumentando que lo compró en 2015, el juez rechazó la solicitud. Los fiscales creen que Arteaga podría enfrentar una condena mayor a los cuatro años, en caso de ser hallado culpable, mientras que el acusado mantiene la esperanza de lograr una absolución o una pena más leve.
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